En tiempos en los que los blogs de alto volumen optan por disparar ráfagas de notas escritas por fantasmas que teclean de 9 a 6 para generar lo que la línea de producción exige y subsistir a su vez dentro de la precaria economía que las desigualdades alimentan, pienso que es un alivio tener algo como la sección “Autorreferente” de este blog. Hace unos días comentaba con un amigo que este tipo de espacios permiten a los escritores, redactores y seres humanos en general ser ellos mismos y dárselo al mundo. ¿Muy jipi? Quizá pero ¿acaso no tiene más […]